Por la mucha tribulación y angustia del corazón os escribí... para que supieseis cuán grande es el amor que os tengo.
II Corintios 2:4.
Un ministerio que imparte vida y sanidad espiritual debe surgir esencialmente de la experiencia. Este hecho queda claramente destacado en el apóstol Pablo.
ü El ministerio de 1 Corintios, por ejemplo, está firmemente basado en el hombre que es revelado en II Corintios.
ü En 1 Corintios Pablo escribe acerca de cómo Dios elige lo débil; II Corintios demuestra en austera realidad, su propia experiencia de una debilidad divinamente impuesta.
ü En su primer carta apela a los creyentes a la unidad; en la segunda demuestra cómo, a pesar de sus desprecios, todavía se cuenta a sí mismo como uno de ellos.
ü El capítulo 13 de la primera carta contiene su clásico tratado de amor; en II Corintios 12:15 afirma: “Yo mismo me gastaré del todo por amor de vuestras almas”.
ü Finalmente, 1 Corintios 15 nos brinda la enseñanza más clara del Nuevo Testamento acerca de la resurrección, pero en II Corintios hace mención de su desesperada necesidad de confiar momento a momento en el Dios que resucita a los muertos.
En cada punto su doctrina está respaldada con experiencias. En realidad, ninguna otra más que la experiencia cosa constituye la base para un ministro de Cristo.